La nigeriana Okonjo-Iweala asume un segundo mandato al frente de la OMC bajo la amenaza de una guerra comercial
Los 166 Estados miembros de la Organización Mundial del Comercio (OMC) acordaron este viernes por consenso que la directora general Ngozi Okonjo-Iweala ejerza un segundo mandato al frente a esta entidad multilateral, según informó el organismo. La decisión ha sido acordada este viernes en una reunión extraordinaria del Consejo General de la OMC, tras ser la única candidata que se presentó.
Okonjo-Iweala, exministra de Finanzas nigeriana que hizo historia en 2021 al convertirse en la primera mujer y la primera africana directora general del organismo, cuenta con un amplio respaldo entre los miembros de la OMC. En septiembre anunció que volvería a presentarse, con el objetivo de completar “asuntos pendientes”.
Okonjo-Iweala iniciará el 1 de septiembre de 2025 su segundo mandato de cuatro años, lo que significa que coincidirá con el del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, quien amenaza con imponer fuertes aranceles a los productos procedentes de México, Canadá y China.
La reelegida jefa de la OMC tiene por delante un camino difícil por las guerras comerciales que puede provocar Trump desde la Casa Blanca. Precisamente, fuentes del organismo señalaron que el Consejo General de la organización se convocó de forma extraordinaria para acelerar el proceso de nombramiento y evitar cualquier riesgo de que sea bloqueado por Trump, cuyos equipos y aliados han criticado tanto a Okonjo-Iweala como a la OMC en el pasado. Ya en 2020, Trump dio su apoyo a un candidato rival y trató de bloquear el primer mandato de Okonjo-Iweala, quien solo consiguió el respaldo de Estados Unidos cuando Joe Biden llegó a la Casa Blanca.
La OMC, con tres décadas de existencia, vive horas bajas por el bloqueo que persiste desde hace años en ciertas negociaciones claves, como las que buscan reducir los niveles de distorsión (creados por subsidios y otras ayudas) en el sector de la agricultura, pero también porque desde hace varios años no puede cumplir plenamente su papel como foro para dirimir en conflictos comerciales entre países, ya que su máxima instancia de apelación no funciona.
Ello debido al veto de Estados Unidos para la nominación de sus integrantes, ya que todos los que cumplían anteriormente ese rol han ido agotando uno tras otro sus mandatos, por lo cual los litigios comerciales que llegan a la OMC no pueden ser vistos hasta la última instancia de su sistema de solución de disputas, que funciona como una suerte de sistema de arbitraje.
El embajador de Noruega y presidente del Consejo General de la OMC (órgano que reúne a los jefes de las 166 delegaciones nacionales), Petter Ølberg, anunció a la prensa la reelección de Okongo-Iweala y afirmó que esta decisión refleja “el amplio reconocimiento a su liderazgo y a su visión estratégica para el futuro de la OMC”.
La directora de la OMC espera trabajar de forma creativa con nuevo gobierno de Trump en EEUU
“Tenemos una agenda repleta que cumplir (…) y tenemos la firme intención de ponernos a trabajar de inmediato, sin detenernos, para intentar obtener estos resultados”, dijo Okonjo-Iweala a periodistas, citando entre sus prioridades las reformas de la OMC y las negociaciones pesqueras.
La directora general de la OMC dijo que espera trabajar en los próximos años “de manera constructiva y creativa” con la nueva Administración de Donad Trump. A preguntas relacionadas con el anunció del presidente electo de que una de las primeras medidas que tomará cuando regrese a la Casa Blanca el 20 de enero próximo será aumentar los aranceles a las importaciones de Canadá, México, China y Europa, la responsable comercial eludió entrar en controversias y señaló que “todavía no hay detalles sobre lo que se está planeando, así que es prematuro pronunciarse”.
Okonjo-Iweala dijo que lo deseable en estos momentos sería evitar conflictos comerciales que puedan afectar el sistema mundial del comercio, pero que para poder valorar este riesgo primero hay que ver cuales serán en la práctica las políticas comerciales que se adopten. Agregó que para avanzar en los temas que la OMC tiene pendientes “todos los países deben ponerse a trabajar los unos con los otros”.
“La OMC y sus reglas abarcan entre el 75% y 80% de los intercambios mundiales de bienes y no creo que nadie quiera poner esto en cuestión. Más bien creo que hay un reconocimiento general de que la organización debe ser apoyada y debe seguir trabajando”, comentó en una rueda de prensa.